El Referente de Becados Precarizados del ministerio de educación de la provincia del Chaco, Jhony Cuenca, expresó que los trabajadores siguen recorriendo y manifestándose pacíficamente, visitando distintas localidades para dar a conocer la situación de precarización que están atravesado, no sólo en la capital chaqueña, si no también en el resto de la provincia. En esta ocasión, el reclamo se dió en la ciudad de Fontana.
El acompañamiento avanza hacia las diferentes localidades, desde el Área Metropolitana del Gran Resistencia, en la misma Capital, también Fontana, Barranqueras, Tirol, hasta Villa Ángela, Quitilipi, Makallé, San Martín, Charata, Las Breñas, entre otras, para reclamar alguna solución ante la difícil situación que están viviendo, con sueldos por debajo de la linea de la pobreza.
Según explicó Cuenca, el grupo a su cargo cuenta de unas 370 personas, mientras que a nivel provincial actualmente son aproximadamente 4000 trabajadores que reclaman por sus derechos a un sueldo digno, o al menos una mejora salarial.
«Actualmente estamos cobrando $70 mil pesos. Desde el gobierno de Zdero los funcionarios nos pidieron paciencia, que iban a hacer un relevamiento acerca de los trabajadores, ya va a ser 1 año y meses de gestión, y es mucha la paciencia que estamos teniendo»
El reclamo se basa en cuatro puntos: contrato, pase a planta mejora salarial, y cobertura de salud. «Hay compañeros que tienen más de 20 años de precarización, y rondan los 70 años, además de sufrir maltrato por parte de los directivos», resaltó.
Aunque comprenden que dada la situación del país y la provincia, puede no ser factible el pase a planta, al menos esperan conseguir un contrato de servicio con mejora salarial y cobertura de salud, para seguir ejerciendo su labor en condiciones más dignas.
Los trabajadores desempeñan su labor de lunes a viernes, sin cobertura de salud «trabajamos igual y más que un portero de planta que tiene todos los beneficios de un trabajador digno, e incluso un sueldo medianamente mucho mejor a comparación de nosotros», explicó el referente, quien además remarcó que con los valores actuales de una canasta familiar, que es de $1 millón de pesos, con los $70 mil pesos que ellos cobran, no sólo es insuficiente en todos los sentidos, «ya no estamos por debajo de la pobreza, ni de la indigencia, estamos por debajo de la alfombra».
Cave resaltar que los porteros precarizados son auto-combocados y no pertenecen a ningún gremio, movimiento ni cooperativa. El Referente se traslada llevando el reclamo de sus colegas a lo largo y ancho de la provincia en su motocicleta, sin recibir ninguna monetización o ayuda a cambio, mientras lucha por sus derechos y tratan de visibilizar la injusticia que están atravesado.
«Somos las personas que mantenemos limpias y ordenadas las instituciones, para que nuestros hijos, y todos los estudiantes tengan un espacio en condiciones, un aula limpia, y pedimos de forma pacífica y amable, priorizando el diálogo, poder hablar con el Gobernador Zdero o la señora Ministra de Educación Sofia Naidenoff para comentarle nuestra situación», expresó.
Los trabajadores vienen pidiendo audiencias por un largo periodo de tiempo, sin recibir siquiera una respuesta por parte de los funcionarios, aunque les han prometido un aumento con anterioridad, este mes volvieron a cobrar la misma suma de $70 mil pesos, sin cobertura de salud.
Nota: Flora Ivanna Torres Seiler
