La muestra del Centro Cultural Recoleta que reúne obras de Berni, Forner, Stern, Schvartz y Maresca entre otros, sobrevuela momentos de dos siglos a través de una figuración desgarradora y onírica
Un meme, una fotografía sacada en una librería, que circula por las redes, dice algo así como: “Las novelas distópicas fueron movidas a la sección Historia”. La aseveración cotiene un potente condimento de humor trágico, juega con la realidad y, a su vez, con lo parece imposible, como dos caminos que, finalmente, se conectaron.
Bastante de ese espírito recorre a Carroña última forma, una propuesta potente y política que se desenvuelve a través de la figuración pictórica, la fotografía y el video, en el Centro Cultura Recoleta.
La imagen de una ciudad en ruinas, del horror que se hace presente, a través de un tríptico compuesto por obras de Antonio Berniy Raquel Forner, azota la vista cuando se ingresa. Pero antes, un cartel, otro cartel, advierte sobre que las imágenes quizá despiertan la susceptibilidad de los menores y es que la exhibición, co-curada por Carla Barbero y Javier Villa, se mueve entre la crudeza estética y conceptual, con el cuerpo de la mujer como eje, para relatar una mirada de la historia argentina desde el arte.
El título de la muestra proviene del libro homónimo de Leónidas Lamborghini (Buenos Aires, 1927–2009), publicado en 2001, en el que el poeta, retomando la tradición que inició el dadaísmo, y que tuvo en Oliverio Girondo a uno de sus grandes innovadores en el país en esto de ingresar en el caos de la ciudad de manera fragmentada, pone en escena un “personaje que va medio loco por esta ciudad en ruinas, con imágenes de una especie de putrefacción que observa”, dice Barbero, en un recorrido con Infobae Cultura.
Una vitrina contiene anotaciones de Osvaldo Lamborghini, de lo que luego sería el Teatro Proletario de Cámara
El poema marca el tono de una propuesta curatorial que desafía genealogías lineales y que se encuentra ‘espalda con espalda’ -pared mediante- con una vitrina que contiene anotaciones de su hermano, Osvaldo Lamborghini (Buenos Aires, 1940 – Barcelona 1985), de lo que luego sería el Teatro Proletario de Cámara, obra póstuma y experimental en la que, en el encierro de sus últimos años en Barcelona, combinó elementos literarios, visuales y políticos, explotando la relación entre la escritura, el collage y la materialidad del libro y las revistas.
La muestra se presenta como una ciudad que se erige de espaldas al río, ya que cuando se ingresa las obras no pueden ser vistas al instante, sino que el encuentro sucede al pasar una serie de paneles, generando una sensación de algo misterioso, oculto, una instancia que solo puede ser abordada por aquellos que se animen.
No deja de ser inconscientemente simbólico que la puesta curatorial -en la que toda la expo gira en torno a estas tres piezas históricas de Berni y Forner del centro de la sala Cronopios- pareciera inducirnos a creer que aquellos que se expresan en torno a lo político, de alguna manera estarían separados del resto de la sociedad, de lo que sucede allá afuera, más allá de la puerta de ingreso.
La muestra parece desplegarse de un centro, formado por un tríptico, hacia los bordes con temáticas que se unen
La exhibición, explica Barbero, invita a “reflexionar sobre el realismo en el arte argentino, de modo transgeneracional, pero sobre todo muy basado en experimentaciones materiales, no solo como los temas o los momentos históricos, sino cómo también desafiaron ciertas imágenes, cierto imaginario a través de esa la materialidad”.
Los paneles contienen pinturas que están, si pensamos en lo histórico-temporal, ancladas en un presente, con temas que sobrevuelan la agenda social, desde la violencia y la injusticia, el feminismo y los cuerpos, a la crueldad de lo cotidiano, a través de las pinturas de Santiago O. Rey y Verónica Gómez.
Rey (Buenos Aires, 1983) se presenta con cinco obras en gran formato, comisionadas para la expo, a partir de las cuales crea una “pintura muy escultórica” para construir “imágenes bastante dialécticas, a partir de estrategias específicas que se asocian a la literatura”.
En sus trabajos, juega con lo ambiguo y lo evidente, generando escenarios en un punto desconcertantes en los que conviven lo humorístico con lo crítico, como, por ejemplo, en Nocturno con silobolsa y tajo, en la queun mono transmite cierta inocencia con su gesto de ‘yo no fui’, mientras disemina su esperma por todo el cielo y un cuerpo femenino yace roto sobre costado, entablando un dialogo con la serie fotográfica de Marco López Liliana Maresca con su obra, artista que se encuentra en la expo, y también con la pieza central de Forner, que se encuentra elevada en el centro de la sala, entre las dos de Berni, en una especie de santisima trinidad.
Fragmento de “Nocturno con silobolsa y tajo” de Santiago O. Rey
Rey recurre a lo delirante para ingresar en el campo de lo político: su paisaje pampeano es tanto una herramienta compositiva que le permite que no se generen distracciones como también un territorio de lo simbólico, la matriz de una producción, de una forma de entender las relaciones de poder.
En sus escenas hay una voz, una enunciación, que además logra unir virtuosamente no a través del relato único, sino con operaciones que en tanto cómicas no dejan de estar cargadas de tragedia, como Nocturno con siembra directa (el destape de los unicornios) o Nocturno con Misoprostol Garrón, en las queaborda de manera directa el tema del aborto, estableciendo una analogía entre la violación a la propiedad privada y la violación del cuerpo femenino.
“Hay mucho de tomar cosas de los medios de comunicación, de las redes sociales tipo Twitter… y en vez de ser sumiso con eso o tomarlo para criticarlo, lo toma para exacerbar”, spstuvo Barbero.
Por su parte, Gómez (Buenos Aires, 1978) aparece con siete pinturas realizadas en 2024 y 2025, algunas que se pudieron ver en su última muestra, Las vestiduras peligrosas, y otras realizadas especialmente para Carroña.
De un lado, obras de Rey y, del otro, de Verónica Gómez
En las obras de “Gomez hay una recurrencia central sobre el lugar que tiene la mujer o la figura femenina en sus fábulas. También están como estos otros personajes, más o menos endemoniados, que siempre tienen un lugar muy poderoso”, dice Barbero, quien además resalta a un par de cuadros “donde el cuerpo se representa desde la interioridad, como en los casos de hígados y corazones expuestos”.
En las piezas de la pintora habita un espíritu de cronista y a la vez son profundamente alegóricas, juegan constantemente con el hoy, pero lo hace a través de herramientas de la Historia del arte, creando así atmósferas plenas de guiños que tienen su anclaje en lo real, en lo que está sucediendo. Todo aquello que pueda disparar una asociación en la obra de Gómez puede ser correcto. Y, como con Rey, también recurre a elementos distorsionantes que detrás de cierta candidez o humor nos revelan situaciones complejas.
En el centro de la sala se encuentra el tríptico ya citado. La Victoria (1939), la pieza más antigua de la muestra, de Forner (Buenos Aires, 1902–1988) que fue la última de su serie de España, quien conmocionada por los horrores del a guerra civil, presenta “el cuerpo de la mujer como centro de disputa del campo de batalla, pero también como botín“.
Berni (Rosario, 1905 – Buenos Aires, 1981) aparece con dos assamblage, La tortura y La Guerra, ambos de 1976. La primera, que reapareció tras 30 años en la edición 2024 de arteba, no deja espacio a interpretaciones equívocas. La segunda, tampoco.
“La Guerra”, de Antonio Berni
“Ambas obras dan cuenta, tempranamente, de los horrores de la última dictadura cívico-militar y nos obligan a mirar sin desvíos al rostro más brutal de lo humano, donde el cuerpo femenino vuelve a ser el centro y la encarnación de los momentos de mayor oscuridad en la historia argentina”.
De estas tres obras se ‘desprenden’ otras tres de Marcia Schvartz (Buenos Aires, 1955), que si bien abarcan estilos y series diferentes, comparten una frontalidad feroz para abordar la realidad desde lo social y lo íntimo. Berniadas (2001) es una instalación que incluye fotos, catálogos y diarios personales, surgida en el contexto de la ante última gran crisis política y social, en la que utiliza el cartón como material principal, en sintonía con la emergencia de los cartoneros, con una “ferocidad que discute tanto hacia adentro del arte como hacia afuera”.
En el esamblage El Entorno (2014) se observa a Perón y Eva en el balcón saludando a las masas, mientras detrás una serie de personajes siniestros, como al economista Martínez de Hoz o un demoníaco José López Rega, creador de la AAA, en plena acto de brujería. O ya (2019), por otro lado, es una pieza de técnica mixta -con lana, arena, caracoles, ramas y velas- en la que el centro vuelve a ser el cuerpo femenino, que “que no se sabe si está apareciendo o se está desintegrando”.
“Berniadas” de Marcia Schvartz
En otra de las secciones, aparecen 12 piezas de Tobías Dirty (Villa Gesell, 1990), entre pinturas y esculturas, algunas que se exponen por primera vez, como Trasplánte de médula y Radiografía, en las que ingresa en una vivisección del cuerpo humano o Menage a trois, en la que aborda la tela desde una figuración desfigurada.
“Nos parecía importante que apareciera una voz y una figuración de cuerpos donde ya no es el hombre o la mujer, sino que empiezan a ser estas formas más abiertas, fantásticas, surreales, del cuerpo, pero desde una interioridad”, dice.
Entre las obras, aparecen seis de Centro Cultural, muestra realizada para su cumpleaños 30, en la que capturó treinta escenas emblemáticas de cada año de su vida, y en las que aparecen desde el atentado a la AMIA, la ley de convertibilidad, el Pacto de Olivos, los asesinatos de Kosteki y Santillán, las elecciones del 2003 y la tragedia de Cromañon.
Algunas de las obras de Tobías Dirty
La figura deLiliana Maresca(Buenos Aires, 1951-1994) surge con una de sus acciones más recordadas, cuando posó desnuda sobre una serie de gigantografías, estableciendo una relación cruda entre el cuerpo y las discusiones políticas de la época del primer menemismo, realizando conexiones con las relaciones carnalaes con EE.UU, la última dictadura y la crisis del SIDA. Tras la muestra, Maresca trasladó los paneles a Costanera Sur, instalándolos entre escombros y realizando una acción que ha quedado registrada en numerosas fotografías.
“Fueron obras de una época muy activa de ella. Tenía unas ganas enorme de vivir cuando ya sabía que iba a morir y realizó varias muestras en el Recoleta, como La Kermesse (1986), Recolecta (1990), Wotan-Vulcano (1991), La Conquista (1991-1992), e Imagen Pública – Altas Esfera (1993). Estas imágenes no son nuevas, pero nos parecía intersante hacer esta propuesta medio hiperbólica entre las imágenes de ella con una puesta en escena de esta acción de Costanera Sur”, cuenta Barbero.
Es una representación también de “estos artistas que le ponían el cuerpo a discusiones de la coyuntura desde un lugar que hoy es más habitual, pero en ese momento era algo muy desafiante”.
Las imágenes de Maresca remiten, en su puesta, a la acción realizada en Costanera Sur
A un costado, la expo recupera los fotomontajes de Grete Stern (Wuppertal-Elberfeld, Alemania, 1904 – Buenos Aires, 1999) para la revista Idilio, realizados entre 1948 y 1951, con los que fue pionera en la relación entre fotografía y diseño gráfico. Estas obras ilustraban los sueños y angustias de amas de casa en una época en la que el voto femenino recién se aprobaba en Argentina.
“Casi como un registro social y político del primer peronismo, Stern se involucró con temas como el amor y el deseo, pero también el miedo y la angustia que circulaba en aquellos tiempos y que llegan hasta el presente con una actualidad notable”.
Las piezas se muestran por primera vez expandidas, en enormes proporciones, lejos de las puestas en tamaña original en gelatina pensada para coleccionistas en que se las suele ver y que revelan así el trabajo de la fotógrafa, la superosición, los cortes, el pulso de cada pieza, desnudando su dimensión gráfica.
Se presentan algunos de los fotomontajes de Grete Stern para la revista “Idilio”
Finalmente, se cierra con Negociación (2006-2014), una videoinstalación de Verónica Meloni (Córdoba, 1974): “Ella es una artista performer, que en 2006 se muda al centro de Córdoba, a la parte del Mercado de Abasto, que es una zona roja. Cada vez que pisaba la vereda, a cualquier hora, tenía preguntas de cuánto cobraba, como que automáticamente por ser mujer y por andar por la zona despertaba ese interés”.
“Desde el principio eso le empezó a incomodar un montón, se sentía muy atravesada, con un poco de miedo o ansiedad. Entonces decidió afrontar esa situación entre cotidiana y vital, con una acción que en ese momento ella no tenía idea tampoco hacia dónde iba a ir: consistía en que cada vez que la frenaran para preguntarle algo, ella se acercaba y entablaba una conversación que no implicaba un intercambio de dinero ni de servicios sexuales. Contaba que era artista y les preguntaba cosas random. ‘¿Vos venís siempre?’ Ahí empezó esa puesta en acción de ese cuerpo”, explica Barbero.
A través de su desglose, desde O. Rey y Gómez, mirando más al hoy, a las históricas en el centro de Berni y Forner, como después con el resto de los artistas girando en torno a temas de un pasado que continúan vigentes, Carroña propone un viaje donde los actual se une con un núcleo de horrores que puede extenderse a diferentes momentos del país. Carroña es mirada sobre la figuración, pero no cualquiera, sino un ingreso del estilo causa-efecto a una serie de artistas que, con distintos lenguajes, ven o vieron en lo social aquello que los conforma, aquello que está en el aire y que se les hace carne.
Carroña es una muestra en la que las obras van completando un panorama de crueldad en las que las decisiones políticas no son ajenas. No se trata sobre una crueldad humana, sino sobre sistemas de reproducción de horrores que aparecen disfrazados de diferente manera, un ciclo de perpetuación que por momento se agazapa, pero que siempre está latente. Es como si la distopía en el arte se hubiera mudado a la sección de Historia.
*Carroña última forma, en el Centro Cultural Recoleta, Junín 1930,CABA. De martes a viernes 12 a 21 h, y sábados, domingos y feriados 11 a 21 h. Lunes cerrado. Entrada gratuita para residentes en Argentina, no residentes en Argentina mayores de 12 años: $6000. Personas con discapacidad y acompañante, sin cargo.
El brutal ataque se llevó a cabo e la ciudad de Komanda. Las autoridades también reportaron incendios de viviendas y secuestros en zonas cercanas
El número de muertos por un ataque a una iglesia católica en el este de la República Democrática del Congo por parte de rebeldes respaldados por el Estado Islámico ha aumentado a 34, informó un líder de la sociedad civil.
“Los cuerpos de las víctimas aún están en el lugar de la tragedia y los voluntarios están preparándose para enterrarlos en una fosa común que estamos preparando en un recinto de la iglesia católica”, dijo a The Associated Press Dieudonne Duranthabo, coordinador de la sociedad civil en Komanda, en la provincia de Ituri.
Al menos otras cinco personas murieron en un ataque anterior en el cercano pueblo de Machongani, de donde se está llevando a cabo una búsqueda.
“Se llevaron a varias personas al bosque; no conocemos su destino ni su número”, dijo a la AP Lossa Dhekana, un líder de la sociedad civil en Ituri.
Se cree que ambos ataques fueron llevados a cabo por miembros de la Fuerza Democrática Aliada (FDA) armados con armas de fuego y machetes.
El ejército confirmó al menos 10 muertes, mientras que reportes de medios locales sitúan el número en más de 40.
Exintegrantes de las Fuerzas Armadas y agentes de policía de la República Democrática del Congo. (AP Foto/Moses Sawasawa, Archivo)
Duranthabo indicó que los atacantes asaltaron la iglesia en la ciudad de Komanda alrededor de la 1 de la madrugada. También incendiaron varias casas y tiendas.
El teniente Jules Ngongo, portavoz del ejército congoleño en la provincia de Ituri, confirmó 10 muertos en el ataque a la iglesia.
Imágenes de video del lugar compartidas en línea parecían mostrar estructuras en llamas y cuerpos en el suelo de la iglesia. Aquellos que pudieron identificar a algunas de las víctimas lloraban mientras otros permanecían en estado de shock.
Una emisora de radio respaldada por la ONU dijo que 43 personas fueron asesinadas, citando fuentes de seguridad. Dijo que los atacantes vinieron de un bastión a unos 12 kilómetros del centro de Komanda y huyeron antes de que las fuerzas de seguridad pudieran llegar.
Duranthabo condenó el ataque “en una ciudad donde están presentes todos los funcionarios de seguridad”. Añadió: “Exigimos intervención militar lo antes posible, ya que se nos dice que el enemigo todavía está cerca de nuestra ciudad”.
El este del Congo ha sufrido ataques mortales en los últimos años por parte de grupos armados, incluidos la FDA y rebeldes respaldados por Ruanda. La FDA, con vínculos con el Estado Islámico, opera en la frontera entre Uganda y República Democrática del Congo y a menudo ataca a civiles. El grupo mató a decenas de personas en Ituri a principios de este mes en lo que un portavoz de las Naciones Unidas describió como una masacre.
Miembros del grupo rebelde M23 viajan en una camioneta mientras abandonan su posición para realizar patrullas en medio del conflicto entre ellos y las Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo (FARDC), en Goma, este de la República Democrática del Congo, el 29 de enero de 2025. REUTERS/Stringer//Foto de archivo
La FDA se formó a partir de pequeños grupos dispares en Uganda a finales de la década de 1990 tras un supuesto descontento con el presidente Yoweri Museveni.
En 2002, tras asaltos militares por parte de las fuerzas ugandesas, el grupo trasladó sus actividades al vecino Congo y desde entonces ha sido responsable de la muerte de miles de civiles. En 2019 juró lealtad al Estado Islámico.
Las Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo (FARDC), que han luchado durante mucho tiempo contra el grupo rebelde, han enfrentado ataques desde que se reanudaron las hostilidades con el M23, respaldado por Ruanda.
La firma francesa de moda produce algunos de los bolsos, relojes, joyas, perfumes, zapatos y otros artículos sumamente exclusivos en el mundo
Una investigación en marcha en los Países Bajos ha puesto en el foco a Louis Vuitton Países BajoS, filial de la marca francesa de lujo, por supuestas irregularidades vinculadas a la venta de artículos a una clienta china involucrada en un caso de lavado de dinero. La fiscalía neerlandesa analiza si la empresa pudo haber incumplido la normativa sobre prevención de lavado de capitales tras detectar patrones de compra sospechosos, según publicó The New York Times.
Las autoridades acusan a Bei W., identificada solo con sus iniciales por la legislación neerlandesa, de blanquear cerca de 3 millones de euros (3.5 millones de dólares) entre septiembre de 2021 y febrero de 2023. De acuerdo con la acusación, la mujer realizó compras frecuentes en efectivo, siempre por debajo del umbral de 10.000 euros que obliga a reportar transacciones, lo que despertó la sospecha de los investigadores. En los hechos están implicados otros dos acusados, uno de los cuales trabajaba en la propia tienda y supuestamente alertaba a la cliente sobre la llegada de nuevos productos.
La fiscalía sostiene que los artículos adquiridos se enviaban posteriormente a Hong Kong y China. Según los investigadores, el dinero provenía de actividades delictivas realizadas por una persona ya condenada en relación con la trama, informaron las autoridades neerlandesas citadas por The New York Times.
Artículos de lujo y delitos financieros
Una de las exlcusivas tiendas Louis Vuitton en Nueva York. (REUTERS/Adam Gray)
El caso destaca el papel potencial de los artículos de lujo como vehículos en la delincuencia financiera. Las tiendas de este sector, aunque no tienen las mismas obligaciones de notificación que los bancos, sí deben alertar a las autoridades sobre transacciones sospechosas o inusuales, incluyendo operaciones por debajo del límite establecido legalmente para reportes automáticos, indicaron los funcionarios consultados.
La legislación neerlandesa obliga a observar “indicadores objetivos” como el pago en efectivo superior a 10.000 euros, pero también exige evaluar elementos subjetivos que puedan indicar un delito. La legislación local está alineada con los principios del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), el principal organismo intergubernamental enfocado en la lucha contra el lavado de dinero, subrayó The New York Times.
Expertos consultados explicaron que el método empleado en este caso corresponde a un esquema conocido como “daigou”, basado en la compra en el extranjero por encargo de clientes en China, donde los productos extranjeros suelen ser menos costosos y presentan menos dudas sobre su autenticidad. La diferencia principal de este caso reside en la procedencia ilícita de los fondos, originados en empresas criminales.
Sanciones y antecedentes globales
El lavado de dinero proveniente de clientes chinos ha ido en aumento en los últimos años. (REUTERS/Gonzalo Fuentes/File Photo)
El interés internacional sobre la relación entre bienes de lujo y el lavado de activos ha aumentado. En 2023, el gasto global en artículos personales de lujo superó los 400.000 millones de dólares, según datos presentados por expertos financieros. El empleo del mercado de lujo para ocultar fondos de origen delictivo está ampliamente documentado.
De acuerdo con registros del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) estadounidense, organizaciones chinas especializadas en estas prácticas despliegan “complejos planes de lavado de dinero” para movilizar grandes sumas con rapidez y discreción, tal como declaró en el Senado el funcionario Ricardo Mayoral, citado por The New York Times. Estas bandas suelen reclutar empleados dentro de las propias empresas para facilitar las operaciones ilegales.
Declaraciones de James R. Richards, exdirectivo de gestión de riesgos en Wells Fargo, y de Alex Zerden, antiguo funcionario del Departamento del Tesoro, apuntaron a la persistencia sostenida del problema a nivel global. Ambos subrayaron que, pese a décadas de esfuerzos regulatorios, los criminales persisten en buscar vulnerabilidades del sistema financiero, lo que incluye al mercado del lujo.
La Fiscalía neerlandesa mantiene abierta la investigación y Louis Vuitton Países Bajos permanece bajo observación por las autoridades.
El accidente ocurrió cerca de la ciudad de Riedlingen, y las causas aún están bajo investigación
Al menos cuatro personas murieron y varias más resultaron heridas este domingo luego de que un tren regional que transportaba a cerca de 100 pasajeros descarrilara en una zona boscosa y montañosa cerca de la ciudad de Riedlingen, en el estado federado de Baden-Württemberg, en el suroeste de Alemania, informaron autoridades policiales y medios locales.
Un portavoz de la policía de Stuttgart confirmó que “varias personas resultaron heridas” y que al menos dos vagones se salieron de las vías. Las circunstancias exactas del siniestro aún no han sido esclarecidas. La formación realizaba el trayecto de 90 kilómetros entre Sigmaringen y Ulm cuando se produjo el accidente.
Fotografías difundidas por la agencia DPA muestran vagones volcados sobre sus costados, apilados unos contra otros, en medio de la vegetación junto a la vía. Equipos de rescate, bomberos y personal sanitario acudieron al lugar para asistir a los pasajeros atrapados. El ministro del Interior de Baden-Württemberg, Thomas Strobl (CDU), también se dirigió al sitio del siniestro, según confirmaron fuentes oficiales.
Al menos cuatro personas murieron y varias resultaron heridas este domingo tras el descarrilamiento de un tren regional en una zona boscosa del suroeste de Alemania (Photo by Thomas Warnack / dpa / AFP) / Germany OUT
Un portavoz policial citado por la agencia AFP declaró que cuatro personas habían sido halladas sin vida, aunque la cifra de fallecidos podría aumentar con el correr de las horas, dado que los trabajos de búsqueda y rescate continuaban avanzando entre los vagones deformados. Por su parte, la policía local declaró al medio Badische Zeitung que hay “al menos tres heridos” confirmados, sin especificar el estado de gravedad de los mismos.
La formación se encontraba transitando por un tramo montañoso y boscoso de difícil acceso, lo que complicó las tareas de rescate. Según reportó el diario Südwest Presse, el hospital regional en Ulm comenzó a liberar camas para recibir heridos, anticipando un incremento en la llegada de pacientes desde el lugar del accidente.
El siniestro se produjo cerca de las 15:00 horas (local), en un tramo de vía que atraviesa una zona rural del distrito de Biberach. Las condiciones climáticas en la región eran inestables en el momento del accidente, y algunas fuentes no oficiales mencionaron la posibilidad de que vientos fuertes o caída de árboles sobre la vía pudieran haber contribuido al descarrilamiento, aunque esta hipótesis no ha sido confirmada por las autoridades.
Hasta el momento, no se ha establecido una causa oficial del accidente. La fiscalía local ha iniciado una investigación preliminar para esclarecer los motivos del descarrilamiento, mientras expertos en infraestructura ferroviaria evaluaban el estado de las vías en el tramo afectado.
Los equipos de rescate trabajan en el lugar del descarrilamiento de un tren cerca de Riedlingen, cerca de Biberach, el 27 de julio de 2025 (Thomas Warnack / dpa / AFP)
En declaraciones a medios alemanes, algunos testigos relataron que el tren se sacudió bruscamente antes de detenerse, y que los pasajeros vivieron momentos de pánico antes de ser auxiliados por equipos de emergencia. “Sentimos un golpe y después todo fue un caos”, dijo uno de los sobrevivientes citado por Der Spiegel.
El operador ferroviario no ha emitido aún una declaración oficial sobre el accidente, aunque fuentes del sector aseguraron que se trata de un tren regional de uso frecuente entre pequeñas localidades del sur de Alemania. El tráfico ferroviario en la línea entre Sigmaringen y Ulm fue suspendido hasta nuevo aviso, mientras continúan los trabajos de remoción y peritaje.
El descarrilamiento de este domingo se suma a una serie de incidentes que han afectado el sistema ferroviario alemán en los últimos años, aunque este representa uno de los más graves por el número de víctimas fatales reportadas hasta ahora.